El azúcar puede duplicar tu riesgo cardiovascular

El estudio no puede ser más reciente, pues ha sido publicado este mes de febrero por el Journal of American Medical Association. Para el mismo se recurrió a encuestas realizadas durante 14 años a miles de estadounidenses con el propósito de analizar el consumo de azúcar. En total, se halló que la mayoría de estadounidenses consumen un 10% o más de sus calorías en forma de azúcar. 

Aquéllos que consumían entre 17-21% de sus calorías en forma de azúcar tenían un 38% más riesgo de enfermedad cardiovascular que quienes consumían un 8% de sus calorías como azúcar. Aquéllos que consumían más del 21% llegaban a duplicar su riesgo cardiovascular.

A la derecha podemos ver un libro del Dr Robert Lustig, que es una de las principales voces médicas en EEUU contra el consumo de azúcar.  Esta misma semana el New York Times le entrevistaba. Me gustaría reproducir alguna parte. 

"No creo en una sola dieta o cocina específica. Muchas pueden funcionar, pero no sin son procesadas. Pioppi, Italia, es el origen del concepto actual de dieta mediterránea. ¿Comen mucha pasta? No. Comen carne y vegetales y algo de vino y aceite de oliva. La cuestión es que cada país tiene su cocina y cada cocina funciona para ese país. Pero hay algo que no funciona para ninguno: los alimentos procesados. Y cualquier país que adopta comida procesada, donde quiera que esté, enferma. Por esto me gusta más ser un tipo anti-comida procesada más que sólo un hombre anti-azúcar."

"Normalmente los niños obesos que trato viven en una familia con padres con sobrepeso, y cuando el niño pierde peso también lo suelen hacer los padres, porque éstos cambian lo que se come en casa. Al hacer la cocina más segura para el niño la hacen también para ellos. Pero si el padre es adicto al azúcar y no la sacan de casa, el niño no mejora. Si un padre dice 'Oh, es un problema de mi hijo, yo seguiré comiendo galletas', entonces nadie mejora. Vemos esto mucho."

"En nuestra clínica hacemos algo que no hacen otros, y es clave para nuestro éxito. Lo llamamos el 'aprendizaje del desayuno'. Todos los niños vienen en ayunas para hacerse un análisis de sangre, por lo que están hambrientos. Un total de 6 familias se sientan en una mesa comunal en la que nuestro nutricionista emplea una hora. El nutricionista narra exactamente qué alimentos hay en esa mesa tanto a los padres como a los niños a la vez.  

Nos aseguramos que delante de esa comida saludable para el desayuno suceden cuatro cosas. Primero, demostrar a los padres que sus hijos comerán eso, segundo mostrar a los niños que sus padres desayunarán también eso, tercero mostrar a los padres que los restantes niños que no son suyos comerán eso porque tienen que se capaces de tener invitados y compañeros de sus hijos en casa. Por último les enseñamos la factura del supermercado de ese desayuno saludable para demostrarles que es asequible comer sano. Si estas cuatro cosas no se producen, las cosas no cambiarán en casa." 

"Si un niño aprende a desayunar conforme al programa nacional de desayunos en escuelas en EEUU, que es lo que aprenden el 25% de niños, adivina qué obtienen: un bol de cereales con un vaso de zumo, lo cual equivale a 11 cucharaditas de azúcar. Esto es lo que debemos combatir."