Trucos y reglas para mejorar la salud digestiva

Todos sabemos, eso espero, que seguir una dieta antiinflamatoria es la base. Pero, aun así, muchas veces acaban presentándose problemas digestivos que en muchos casos tienden a hacerse casi crónicos. Siendo diversos los posibles remedios o correcciones que podemos (y debemos también a modo preventivo en muchos casos) implementar, éstos serían los principales pequeños trucos de manual de uso para nuestro sistema digestivo. Aunque muchos de ellos de algún u otro modo ya los conozcamos, bien vale la pena atenderlos más. ¿Cuántos fumadores, aun siendo conscientes del perjuicio del tabaco, hacen caso omiso de lo que saben y hacen poco, o muy poco o nada, por implementar esos necesarios cambios?

- Sigue horarios regulares con las comidas.

. Sigue horarios regulares con el sueño. Los llamados ritmos circadianos, de alterarse mucho, pueden acabar afectando al sistema cardiovascular y digestivo entre otros

- Comerás despacio. A este propósito, lo ideal es comer sentado a una mesa y dedicado más o menos exclusivamente a ese acto, que en gran parte es un acto social (con familia, amigos...). Pues se ha comprobado, por ejemplo, que si comemos viendo la televisión tendemos a comer innecesariamente de más (parece que porque no atendemos a la señal de saciedad del cerebro tanto como a las de nuestro televisor LED)

- Bebe agua antes y fuera de las comidas más que durante las mismas.

- Beberás preferentemente agua y preferentemente, sobre todo, del tiempo. Las bebidas frías deberían ser más excepción que norma. Éstas no sólo dificultan la absorción de nutrientes, sino la digestión misma. En general, convengo con la medicina oriental en que suele ser un factor que tener en cuenta beber bebidas del tiempo, y sobre todo infusiones, sopas y caldos calientes, en procesos curativos. Las infusiones de manzanilla, menta o hierba luisa suelen ser las más digestivas. 

- Que la fruta tiende a fermentar tras las comidas no es un mito. Por ello, la fruta debería consumirse antes de las comidas más que al final. 

- Redundando en lo anterior, mucha gente tiene problemas con lo crudo. No está de más probar a no comer nada crudo (incluyendo fruta) una vez que ha caído el Sol. No deja de ser cierto que frutas y vegetales crudos tienen el beneficio de las enzimas que poseen para facilitar la digestión, pero se trata como muchas veces de valorar perjuicios y beneficios. 

- Los suplementos que más deberíamos considerar para problemas digestivos de manera habitual o regular son aloe vera y un buen probiótico. En algunos casos de dificultades digestivas, puede valer la pena añadir un suplemento de enzimas para facilitar la digestión y absorción (motivo por el cual las enzimas digestivas son un valor añadido en la vejez, cuando hemos perdido importante parte de éstas de modo natural) 

- Una de las mejoras más apreciables cuando uno elimina alimentos señalados en un análisis de intolerancias alimentarias es a nivel digestivo. En cualquier caso, sepamos que los más sospechosos de ocasionar problemas digestivos tienden a ser la leche de vaca y las legumbres (éstas, por el tipo de polisacáridos 'almidón' - tienen amilopectina C frente a la A que tiene la glucosa.- que poseen que son difícil de descomponer, de ahí las flatulencias típicas que producen las legumbres).

- Los enemigos de la sal tienen aquí otra razón para taparse los ojos. Y es que un poco de sal (que no sea refinada, por favor) mejora por ejemplo la digestión de la proteína al tener la sal un componente principal del ácido hidroclorídrico. Los niveles bajos del mismo están involucrados en la indigestión, la diarrea así como en intolerancias alimentarias.

Como ves, algunas parecen verdades sabidas. Otras, sin embargo, están algo lejos de esos llamados lugares comunes.