Más evidencias de la necesidad de dosis superiores de vitamina D

NUEVO VITAMINA D3 7.000 UI  60 CÁPSULAS

Hace al menos un año que vengo alertando del creciente consenso de la comunidad médica sobre la necesidad de dosis superiores de vitamina D (en el ámbito cardiovascular, en el oncológico y traumatológico, entre otros). En diciembre de 2009, el JAMA (Journal of American Medical Association: "More evidence on low vitamin D levels fuels push to revise recommended intake", 2009) publica un artículo que nos recuerda esto mismo. En el mismo se hace referencia a la enorme evidencia que vincula la insuficiencia de vitamina D con el aumento de riesgo de problemas como "osteoporosis y fracturas óseas, debilidad muscular, cáncer, enfermedades autoinmunes, diabetes, esquizofrenia, depresión, disfunción pulmonar, problemas renales y enfermedad cardiovascular". También se pone de relieve el hecho de que en un estudio se halló que el 70% de norteamericanos entre 1 y 21 años tenían insuficiencia (menos de 30 ng/ml) o deficiencia (menos de 15 ng/ml) de vitamina D. Uno de los puntos clave de este estudio es reclamar dosis superiores de vitamina D a la hora de hacer recomendaciones a la población.

En el artículo se cita a Michael Holick, profesor de medicina, fisiología y biofísica de la Escuela de Medicina de la Universidad de Boston y uno de los mayores expertos en vitamina D, quien considera que están exagerados los miedos por toxicidad de esta vitamina (miedos infundados de los que ya he hablado) ya que, según él, los límites oficiales de total seguridad y sin efectos secundarios deberían aumentarse hasta 5.000 UI diarias para niños y 10.000 UI diarias para adultos. Acerca de por qué está creciendo el conocimiento médico sobre la importancia de esta vitamina, se debe en importante parte en palabras de Holick a que "los pacientes escuchan y leen las noticias y entonces trasladan el interés a sus médicos. Los médicos en principio son reticentes a hacer tests de vitamina D a sus pacientes, pero cuando los hacen encuentran que la deficiencia es bastante común; y es entonces cuando toman auténtica conciencia". Me parece muy importante remarcar la valiosa contribución de los pacientes informados al avance de la buena práctica médica. En agosto de 2009, el American Journal of Clinical Nutrition publicaba un artículo del Dr Vieth ("Experimentally observed vitamin D requirements are higher than extrapolated ones", AJCN, agosto 2009) que apoyaba en 3 estudios previos (dos de ellos suyos: véase 1, 2 y 3) su tesis de las insuficientes dosis recomendadas de vitamina D. De acuerdo a su análisis, 4.000 UI diarias es el promedio que precisa un adulto para mantenerse al menos con 32 ng/ml, el mínimo para no tener insuficiencia. Pero como en el caso de muchos otros nutrientes, si no en todos, la necesidad de vitamina D varía de unos individuos a otros. Por mi conocimiento acerca del estudio y práctica clínica de la vitamina D, aproximadamente entre 1.000 y unas 3.000 UI diarias parece ser una dosis óptima de esta vitamina D para el consumo diario. Sin embargo deben hacerse diversas puntualizaciones:

- Las personas que nunca han consumido vitamina D suelen precisar dosis aún superiores de vitamina D durante las primeras semanas/meses. En general estas dosis iniciales tienden a situarse en casi todos los casos entre 4.000 y 10.000 UI diarias. Casi todos los individuos alcanzan en unos 2 y 4-6 meses un valor óptimo que debe ser a partir de entonces sostenido con la dosis general de unas 1.000 a 3.000 UI diarias. Todos los expertos en vitamina D coinciden en este procedimiento.

- Hay factores o grupos de población que tienen necesidades mayores de vitamina D que el resto: las personas de edad avanzada, las personas de raza negra y en general las pieles oscuras, los habitantes de regiones nórdicas o con poco sol, durante la estación invernal (de noviembre a marzo en el hemisferio norte), personas obesas, así como quienes hacen uso permanente de protector solar y evitan la exposición solar sin la misma.

- Las personas con hipercalcemia deben evitar la suplementación de vitamina D. La suplementación prolongada superior a unas 4.000 UI diarias (más de unas 8 semanas) debe acompañarse de algún control de los niveles de vitamina D (entre 45-50 y 85-90 ng/ml se sitúa el rango óptimo carente de riesgo), que se verifica en un análisis de sangre cotidiano o común.

(1).- "Randomized comparison of the effects of the vitamin D3 adequate intake versus 100 mcg (4000 IU) per day on biochemical responses and the wellbeing of patients" Journal of Nutrition, 2004

(2).- "Efficacy and safety of vitamin D3 intake exceeding the lowest observed adverse effect level", Am J Clin Nutr., 2001

(3).- "Long-term effects of giving nursing home residents bread fortified with 125 microg (5000 IU) vitamin D(3) per daily serving", Am J Clin Nutr., 2009